La
preocupación por una formación integral de la
persona desde cualquier disciplina educativa ha
movido a Alfonso López Quintás a ofrecer un
método
de análisis que contempla cada creación literaria
con
hondura, procurando sacar a la superficie lo que
Unamuno llamaba la "intrahistoria" de los
personajes y desentrañar los enigmas de la existencia
humana representados en cada obra. Con este método
de análisis, la literatura se convierte en una espléndida
lección de ética, en una contribución
de enorme
riqueza y fecundidad para la tarea pedagógica de
formar a niños y jóvenes en la creatividad y
en los
valores humanos positivos.